El potencial de la colaboración entre humanos e inteligencia artificial (IA) ha cautivado nuestra imaginación: un futuro donde la creatividad humana y el poder analítico de la IA se combinan para tomar decisiones cruciales y resolver problemas complejos.
Sin embargo, una nueva investigación del Centro para la Inteligencia Colectiva (CCI) del MIT sugiere que esta visión puede ser mucho más matizada de lo que pensábamos.
EL estudio publicado en Nature Human Behavior, es el primer meta-análisis a gran escala realizado para comprender mejor cuándo las combinaciones humano-IA son útiles para la realización de tareas y cuándo no lo son. Este trabajo proporciona una guía y lecciones para las organizaciones que buscan integrar la IA en sus lugares de trabajo de manera más eficaz.
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La IA brilla en la toma de decisiones, los humanos en la creatividad
Sorprendentemente, la investigación encontró que combinar humanos e IA para tareas de toma de decisiones a menudo resultó menos efectivo que la IA sola. En cambio, los equipos humano-IA mostraron un gran potencial al trabajar juntos en tareas creativas.
El estudio, realizado por la estudiante de doctorado del MIT y afiliada al CCI Michelle Vaccaro, y los profesores de la Escuela de Gestión Sloan del MIT Abdullah Almaatouq y Thomas Malone, llega en un momento marcado por la emoción y la incertidumbre sobre el impacto de la IA en la fuerza laboral.
En lugar de centrarse en las predicciones de desplazamiento laboral, Malone afirma que él y su equipo quisieron explorar preguntas que, según creen, merecen más atención: ¿Cuándo trabajan juntos los humanos y la IA de manera más efectiva? ¿Y cómo pueden las organizaciones crear pautas y salvaguardas para garantizar el éxito de estas asociaciones?
Un análisis exhaustivo de cientos de estudios
Los investigadores realizaron un meta-análisis de 370 resultados sobre combinaciones de IA y humanos en diversas tareas, a partir de 106 experimentos diferentes publicados en revistas académicas y actas de congresos entre enero de 2020 y junio de 2023.
Todos los estudios compararon tres formas diferentes de realizar tareas: a) sistemas solo humanos, b) sistemas solo IA y c) colaboraciones humano-IA. El objetivo general del meta-análisis era comprender las tendencias subyacentes reveladas por la combinación de los estudios.
¿Sinergia o complementariedad?
Los investigadores descubrieron que, en promedio, los equipos humano-IA se desempeñaron mejor que los humanos trabajando solos, pero no superaron las capacidades de los sistemas de IA que operaban por sí solos.
Importantemente, no encontraron una "sinergia humano-IA", lo que significa que los sistemas humano-IA en promedio tuvieron un rendimiento inferior al mejor de los humanos solos o de la IA sola en las métricas de rendimiento estudiadas. Esto sugiere que el uso de humanos solos o de sistemas de IA solos habría sido más eficaz que las colaboraciones humano-IA estudiadas.
“Existe la suposición generalizada de que integrar la IA en un proceso siempre ayudará al rendimiento, pero demostramos que eso no es cierto”, dijo Vaccaro. “En algunos casos, es beneficioso dejar algunas tareas únicamente para los humanos y otras únicamente para la IA”.
Tareas creativas vs. toma de decisiones
El equipo también identificó factores que afectan la eficacia de la colaboración entre humanos e IA. Por ejemplo, para las tareas de toma de decisiones, como la clasificación de deepfakes, la previsión de la demanda y el diagnóstico de casos médicos, los equipos humano-IA a menudo tuvieron un rendimiento inferior al de la IA sola.
Sin embargo, para muchas tareas creativas, como resumir publicaciones en redes sociales, responder preguntas en un chat o generar contenido e imágenes nuevas, estas colaboraciones fueron a menudo mejores que el mejor de los humanos o la IA trabajando de forma independiente.
Malone continua:
“Aunque en los últimos años la IA se ha utilizado principalmente para respaldar la toma de decisiones analizando grandes cantidades de datos, algunas de las oportunidades más prometedoras para las combinaciones humano-IA ahora se encuentran en el apoyo a la creación de nuevos contenidos, como texto, imágenes, música y vídeo”.
El equipo teorizó que esta ventaja en los esfuerzos creativos proviene de su naturaleza dual: si bien estas tareas requieren talentos humanos como la creatividad, el conocimiento y la perspicacia, también implican un trabajo repetitivo en el que la IA sobresale.
Diseñar una imagen, por ejemplo, requiere tanto inspiración artística (donde los humanos sobresalen) como ejecución detallada (donde la IA a menudo brilla). De manera similar, escribir y generar muchos tipos de documentos de texto requiere conocimiento y perspicacia humanos, pero también implica procesos rutinarios y automatizados, como completar texto estándar.
Optimizando la colaboración
El equipo de investigación cree que sus hallazgos proporcionan orientación y lecciones para las organizaciones que buscan integrar la IA en sus lugares de trabajo de manera más eficaz. Para empezar, Vaccaro enfatizó la importancia de evaluar si los humanos y la IA realmente superan a los humanos o a la IA trabajando de forma independiente.
“Muchas organizaciones pueden estar sobreestimando la efectividad de sus sistemas actuales”, añadió. “Necesitan evaluar qué tan bien están funcionando”.
Luego, necesitan evaluar dónde la IA puede ayudar a los trabajadores. El estudio indica que la IA puede ser particularmente útil en tareas creativas, por lo que las organizaciones deben explorar qué tipos de trabajo creativo podrían estar listos para la inserción de IA.
Finalmente, las organizaciones deben establecer pautas claras y salvaguardas sólidas para el uso de la IA. Podrían, por ejemplo, diseñar procesos que aprovechen las fortalezas complementarias.
“Deje que la IA se encargue de la investigación de antecedentes, el reconocimiento de patrones, las predicciones y el análisis de datos, mientras que aprovecha las habilidades humanas para detectar matices y aplicar la comprensión contextual”, sugirió Malone. En otras palabras: “Deje que los humanos hagan lo que mejor saben hacer”.
Malone concluyó:
“A medida que continuamos explorando el potencial de estas colaboraciones, está claro que el futuro no solo radica en reemplazar a los humanos con IA, sino también en encontrar formas innovadoras para que trabajen juntos de manera efectiva”.
Fuentes y recursos de información
Vaccaro, M., Abdullah Almaatouq, & Malone, T. (2024). When combinations of humans and AI are useful: A systematic review and meta-analysis. Nature Human Behaviour. DOI: 10.1038/s41562-024-02024-1
