Un artículo publicado en Communications Psychology sugiere que el uso de los medios digitales podría estar contribuyendo, de forma paradójica, a un aumento de los niveles de aburrimiento. A pesar del acceso sin precedentes al entretenimiento, las personas reportan experiencias de aburrimiento con mayor frecuencia, con potenciales efectos adversos en la salud mental, el aprendizaje y el comportamiento.
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El entretenimiento instantáneo y la paradoja del aburrimiento
En un mundo donde el entretenimiento está al alcance de la mano, la sensación de aburrimiento aumenta, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Podemos ver películas al instante, interactuar con amigos online y consumir una cantidad ilimitada de contenido. Sin embargo, datos de encuestas y estudios nacionales indican que las personas reportan sentirse aburridas con mayor frecuencia que nunca, con un aumento significativo en las tasas de aburrimiento entre adolescentes y estudiantes universitarios desde 2009.
Dado que el aburrimiento crónico se asocia con problemas como ansiedad, depresión e incluso comportamientos agresivos, comprender qué impulsa este incremento es fundamental. Tam e Inzlicht proponen que nuestra dependencia de los dispositivos digitales y la accesibilidad constante al entretenimiento podrían estar haciéndonos más susceptibles al aburrimiento en lugar de aliviarlo.
¿Cómo los medios digitales contribuyen al aburrimiento?
Los autores argumentan que la estructura y la naturaleza de los medios digitales pueden aumentar los sentimientos de aburrimiento. Apoyándose en investigaciones empíricas existentes, exploran cómo los medios digitales podrían estar moldeando las expectativas de las personas sobre el compromiso, fragmentando la atención y reduciendo el sentido de significado en las actividades diarias.
Cada uno de estos mecanismos podría crear un ciclo donde las personas recurren cada vez más a los dispositivos digitales para aliviar el aburrimiento, solo para encontrarse sintiéndose menos satisfechas y más propensas al aburrimiento con el tiempo.
Expectativas de compromiso demasiado altas
En primer lugar, argumentan que los medios digitales establecen un estándar muy alto para el compromiso, ya que proporcionan un flujo constante de estímulos gratificantes. Este patrón alienta a los usuarios a buscar una mayor estimulación, elevando sus expectativas sobre lo que es "suficientemente atractivo". Por ejemplo, la evolución del contenido en las redes sociales —de texto a imágenes y luego a videos cortos— refleja una necesidad creciente de un compromiso más rápido e intenso para captar la atención de los usuarios.
Como resultado, las actividades que no coinciden con este nivel de estimulación, como leer un libro o asistir a una conferencia, pueden parecer aburridas en comparación. Evidencia de estudios de muestreo de experiencias, que rastrean los niveles de aburrimiento de los individuos en tiempo real, apoya esta idea; las personas a menudo reportan un mayor aburrimiento después de interactuar con contenido digital, especialmente en las redes sociales y el uso de teléfonos inteligentes.
La fragmentación de la atención como obstáculo para la satisfacción
Otro problema principal es que los medios digitales fragmentan la atención, dificultando la concentración en una sola actividad. Dispositivos como los teléfonos inteligentes ofrecen una variedad de distracciones —notificaciones, múltiples aplicaciones y la capacidad de cambiar rápidamente entre actividades— que interrumpen la concentración sostenida.
Los estudios muestran que las interrupciones frecuentes disminuyen la satisfacción y reducen la capacidad de los usuarios para involucrarse completamente en una tarea, lo que lleva a una mayor probabilidad de aburrimiento.
Por ejemplo, la investigación ha descubierto que el simple hecho de tener un teléfono inteligente cerca puede disminuir la atención y el disfrute en las interacciones sociales cara a cara, intensificando el aburrimiento. La multitarea digital, como navegar en un teléfono mientras se ve la televisión, también socava la capacidad de las personas para mantenerse presentes y comprometidas, contribuyendo aún más a sentimientos de insatisfacción e inquietud.
La pérdida del significado como vacío existencial digital
Un tercer mecanismo clave implica el sentido del significado, que los autores describen como esencial para el compromiso sostenido. Los medios digitales, particularmente las redes sociales y la navegación online, a menudo ofrecen información fragmentada y desconectada. Esta experiencia disjunta puede reducir el sentido de coherencia y significado, llevando a los individuos a sentir que el tiempo que pasan online es insatisfactorio.
Estudios experimentales muestran que las personas con frecuencia sienten una sensación subyacente de falta de sentido después de consumir piezas de información rápidas y no relacionadas, lo que puede impulsar un ciclo de cambio entre contenidos en busca de algo más significativo. Sin embargo, esta búsqueda rara vez satisface, ya que el contenido digital a menudo está diseñado para un consumo rápido en lugar de un compromiso profundo, lo que puede dejar a los usuarios con una sensación de vacío y, en última instancia, aburrimiento.
Si bien la síntesis de Tam e Inzlicht es completa, señalan que la mayoría de los estudios mencionados se centran principalmente en adolescentes y adultos jóvenes. Esto plantea preguntas sobre si los hallazgos se aplican ampliamente a todos los grupos de edad o dentro de diferentes contextos culturales.
Fuentes y recursos de información
Tam, K.Y.Y., Inzlicht, M. (2024). People are increasingly bored in our digital age. Commun Psychol 2, 106. DOI: 10.1038/s44271-024-00155-9